ERTE, ¿Hasta cuando?

18.10.2020

Ya hemos entrado en otoño, y la situación no mejora, al contrario, empeora.

Cada vez son más, y más restrictivas, las medidas que se están adoptando  para tratar de frenar el virus, y las consecuencias sobre todos nosotros son más evidentes, y más perjudiciales. A las restricciones de hábitos de vida saludable (mascarilla, lavado de manos, distanciamiento social, etc.) se están añadiendo restricciones laborales con consecuencias todavía sin determinar, pero que no pintan bien.

Se están confinando ciudades enteras, se están limitando aforos de locales, bien de restauración, bien deportivos, y se está restringiendo sus horarios de apertura. Ello conlleva a que muchos empresarios no puedan mantener sus plantillas, porque esta situación se traduce en un recorte drástico de ingresos, y las tesorerías se resienten, hasta el punto de plantear el cierre del negocio, o de ajustes en plantilla.

Hasta ahora el ERE nos era más familiar como expediente inevitable en un cierre empresarial, motivado por la propia improvisación del empresario o por causa del caprichoso mercado. Desde que empezó la pandemia Covid, lo que se oye es ERTE, añadiendo la T del carácter temporal al citado expediente.

Hemos asistido, y lo que nos queda, a una rueda de ERTEs con sucesivas prórrogas y diversidad de criterios o efectos sobre su aplicación, que al pobre trabajador lo han mareado hasta la desesperación. En unos casos, el tan ansiado pago de la prestación no llegaba, en otros, se desconocían cómo quedaba su derecho a vacaciones después del ERTE. ¿Y si el ERTE es parcial con reducción de jornada?.

En fin, que con tanta modificación legislativa, tanta improvisación, y tanta incertidumbre sobre el rumbo del virus, realmente no sabemos hasta cuando estaremos con ERTEs, y si los fondos europeos podrán resistir tanto estrés, pero desde luego, una buena temporada, aún nos queda, y ahí estaremos para ayudaros. 

Salud para todos.